Mientras el virus de Oropouche continúa afectando a los habitantes de Santiago de Cuba y parece haber cobrado al menos una víctima, otra amenaza complica aún más la ya crítica situación epidemiológica en el territorio oriental. Se ha confirmado la circulación de dos serotipos del dengue, lo que podría provocar el surgimiento de formas graves de esa enfermedad.
Alertas oficiales y situación actual
El Departamento Provincial de Vigilancia y Lucha Antivectorial lanzó este viernes una alerta ante la presencia de dos variantes del virus causante del dengue, en momentos en que “el territorio presenta una elevada infestación del agente transmisor”, principalmente en el municipio cabecera, en Palma Soriano, Contramaestre, Mella y San Luis, donde se reportan más casos de la arbovirosis.
Alfredo Cintra Guerra, responsable de esa entidad, aseguró al diario oficialista Sierra Maestra “que se ha comprobado la circulación de dos serotipos del virus del dengue”, y advirtió que, por ello, hay una “alta probabilidad de que se produzcan formas graves de la enfermedad si no se aplican oportunamente las medidas de prevención”.
Según el funcionario, se están realizando “acciones en las comunidades dirigidas a eliminar microbasurales, salideros, obstrucciones y otras condiciones que favorecen la proliferación de los mosquitos”.
Limitaciones económicas y medidas insuficientes
Pese a la gravedad del asunto, que empeora el ya difícil panorama sanitario en Santiago de Cuba, golpeada desde inicios de mayo por la fiebre de Oropouche, la nota del periódico admite que “las limitaciones económicas actuales impiden intervenciones de gran alcance”.
Aunque “Salud Pública continúa realizando el tratamiento adulticida (fumigación) y el focal en el domicilio de los casos de síndrome febril inespecífico y en los inmuebles aledaños, así como en las manzanas con transmisión de dengue”, afirma el reporte, “esto no es suficiente para garantizar la contención de las arbovirosis”.
El diario insta a la población a “accionar por la salud colectiva” desde los barrios, las casas y los centros laborales, pero no explica con qué recursos cuentan las personas para hacerlo, si el propio Estado se escuda en las “limitaciones económicas” para justificar su falta de eficacia al frenar ambos brotes epidémicos.
Recomendaciones y advertencias
Según el director de Vigilancia y Lucha Antivectorial, “el tanque bajo sigue siendo el depósito más frecuente en la detección de focos” y advirtió sobre el aumento de criaderos artificiales en las viviendas, por ejemplo, botellas vacías, latas y neumáticos sin enterrar que se llenan de agua y donde se reproduce el mosquito Aedes.
El directivo añadió que es deficiente el saneamiento de patios y otros espacios del sector residencial.
La nota recordó que “el dengue grave puede matar” y que “los niños, las embarazadas, los enfermos crónicos y los adultos mayores son las personas que más peligran”.
Advirtió que “todo cuidado es poco para defender la integridad y el bienestar de nuestras familias”, y enumeró acciones para prevenir la propagación del virus: eliminar los objetos que puedan convertirse en criaderos, chapear áreas enyerbadas, abrir zanjas para evitar la acumulación del agua de lluvia en charcos, no verter desechos en la vía pública y acudir al médico en caso de presentarse fiebre.
Sierra Maestra afirmó que con estas medidas también se prevendría la fiebre de Oropouche, y se evitaría “que dos epidemias ensombrezcan la alegría y el esparcimiento que suele traer el verano”.
Mientras tanto, el gobierno sigue sin publicar cifras de diagnosticados con el virus de Oropouche, que ya se expandió a Cienfuegos y Mayabeque, pero podría estar presente en otras provincias cubanas.
Las autoridades del régimen mantienen también absoluto silencio sobre el fallecimiento de personas a causa de este virus, aunque la víspera se conoció por reportes extraoficiales de la muerte del joven santiaguero Richard Daniel Nieves Chaveco, de 22 años, quien se encontraba hospitalizado con síntomas del Oropouche.
El estudiante universitario, vecino del municipio II Frente, falleció a los tres días de haber ingresado en el Hospital Ambrosio Grillo, del municipio Santiago de Cuba, con síntomas del virus.
Preguntas frecuentes sobre el brote de dengue y Oropouche en Santiago de Cuba
A continuación, ofrecemos respuestas a algunas de las preguntas más comunes sobre la situación sanitaria en Santiago de Cuba, enfocadas en la circulación del dengue y la fiebre de Oropouche.
¿Qué serotipos del dengue están presentes en Santiago de Cuba?
Se han confirmado dos serotipos del virus del dengue en Santiago de Cuba, lo que aumenta la probabilidad de que se produzcan formas graves de la enfermedad.
¿Qué medidas se están tomando para combatir el dengue y la fiebre de Oropouche?
Salud Pública realiza tratamientos adulticidas y focales, y hay acciones comunitarias para eliminar criaderos de mosquitos. Sin embargo, estas medidas son insuficientes debido a las limitaciones económicas.
¿Cómo puede la población colaborar en la prevención de estas enfermedades?
Se recomienda eliminar objetos que puedan convertirse en criaderos de mosquitos, chapear áreas enyerbadas, abrir zanjas para evitar la acumulación de agua y acudir al médico en caso de presentar fiebre.