Organizadora de evento fallido en La Habana responde a críticas

Araiz Torres, vinculada a Klatus Creativo, principal patrocinador del evento que terminó este fin de semana con al menos media docena de jóvenes heridos en la Finca de Los Monos, en La Habana, señaló que “falló la comunicación institucional en todos los niveles” y aclaró que “nunca se informó que no se había autorizado” la actividad, entrando en contradicciones con el Gobierno de La Habana, que afirma lo contrario.

En un texto lleno de ironías, la emprendedora—porque aclaró que no es funcionaria ni trabajadora estatal—argumentó que no tenía por qué conocer ni comprobar los protocolos y que la petición estaba hecha por escrito.

Dijo, además, que ahora es más fácil ampararse en la “burocracia” para explicar lo sucedido, y afirmó no renunciar "a un mundo mejor posible". “¿En serio a alguien se le puede ocurrir que tanto mi proyecto como la Finca amanecimos: ‘Hoy es una hermosa mañana para una actividad multitudinaria y descontrolada de adolescentes, hagámosla?”, ironizó Torres al inicio de un extenso texto en el que lamentó que se haya malogrado una propuesta para adolescentes y con adolescentes, "tan necesaria y asequible para el verano".

Críticas a la organización y falta de comunicación

“Como emprendedora, porque no soy funcionaria ni trabajadora estatal, soy independiente; como madre de adolescente que conoce sus necesidades, como abuela, como profesora y realizadora que ha basado su carrera en la creatividad, la formación de nuevas generaciones, la defensa de la cultura y el idioma, pienso que se subestimó el poder de convocatoria de las redes y el alcance de la necesidad que tienen los adolescentes de propuestas como estas”, añadió, argumento que coincide con la explicación dada por la Finca de Los Monos.

Torres dice que ahora hay menos recursos y que una actividad similar lleva "tantos requerimientos" que sería casi imposible de realizar. “Nunca se informó que no se había autorizado, ni que estaba suspendida, así que además falló la comunicación institucional a todos los niveles, porque todos los implicados estábamos ahí para su realización con total desconocimiento, después de una promoción nacional consentida”, añadió.

La emprendedora cubana dijo que los adolescentes siguen sin opciones, que falta adaptarse a las dinámicas actuales y que “es más fácil ampararse en la burocracia”. “A mí me queda la tranquilidad de que se informó por escrito, que se protegieron a los adolescentes participantes que estaban dentro de la instalación, que eran más de 400, que se detuvo inmediatamente el acceso a la institución, cuando responsablemente vimos que el público ascendía de forma exponencial”, precisó.

“Los protocolos no tengo por qué saberlos ni comprobarlos, estaba dando un servicio y la petición de apoyos externos estaba hecha por escrito. Siento pena ajena y no voy a renunciar a un mundo mejor posible”, concluyó.

Klatus Creativo es un negocio con más de cuatro años de experiencia que “presta servicios de producciones audiovisuales e informáticas, campañas publicitarias, eventos y ferias”. Araiz Torres, vinculada a RTV Comercial según su página en Facebook y artífice de Klatus Creativo, iniciativa que en su vertiente cultural organizó el Habanarte en la Finca de los Monos, había promocionado el evento en la televisión e incluso había compartido la comparecencia en sus redes sociales.

“Habanarte, en simbiosis con el gobierno del Cerro, con la propia dirección de la Finca de Los Monos estamos creando toda una especie de jornada, por los cinco años de creada la Finca de Los Monos, y vamos a hacer esta actividad por el inicio del verano”, apuntó Torres durante su intervención televisiva, dando a entender que la actividad estaba en conocimiento de todas las instancias y aprobada en todos los niveles.

En la comparecencia, Torres afirmó que la actividad estaría dirigida a adolescentes de entre 12 y 18 años, argumentando que es importante ofrecerles lugares sanos. Además, puntualizó que habría "espacios de su interés" y otras propuestas culturales.

Un cartel que promocionaba el evento lo presentaba como "Inicio del verano juvenil 2024", previsto para desarrollarse en el horario comprendido entre las 5 y las 11 p.m., con un pago de 100 pesos la entrada y con la presencia de noveles artistas del género urbano.

Respuesta del Gobierno y repercusiones del evento

El Gobierno de La Habana desmintió este domingo que hubiera muertos durante la pelea multitudinaria que tuvo lugar en la tarde-noche del sábado en los alrededores de la Finca de los Monos. Horas después de hacerse viral la noticia en redes sociales, la entidad gubernamental publicó un comunicado en el que calificaba de "falsas" las noticias relacionadas con el fallecimiento de jóvenes, y explicaba que el hecho estaba relacionado con "una actividad no aprobada", donde "se produjo una alteración del orden durante el desplazamiento a las áreas exteriores de la instalación".

La fuente oficialista dijo inicialmente que el incidente dejó dos heridos sin peligro para la vida y que autoridades del Gobierno y la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) intervinieron para restablecer el orden. El texto arremetió, además, contra medios independientes y perfiles en redes sociales que dieron a conocer el hecho. A pesar de las aclaraciones, la pelea dejó fuertes imágenes de jóvenes armados con machetes y otros objetos cortantes, lo cual demostró el elevado nivel de violencia existente en el país.

En las últimas horas, el vocero oficialista Humberto López elevó a seis la cifra de heridos en el suceso, y reiteró el carácter falso de la información que se viralizó en redes sociales. Como es habitual, el desmentido oficial llegó a destiempo, cuando ya las redes ardían con abultadas cifras de muertos y heridos.

Esa realidad, que además es recurrente en Cuba, motivó una breve pero acertada reflexión del popular actor Luis Silva: "¿Sabes por qué hay tantas Fake News? Porque ustedes se demoran mucho en dar las Real News", así de conciso resumió su sentir el actor en sus historias de Instagram, en claro —pero velado— reproche al gobierno.