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Callejón peluqueros

¿Un corte de cabello con instrumental del siglo 18?

Todo eso y más es posible en el Callejón de los Peluqueros, un singular paseo que recrea la historia y tradición de la peluquería en Cuba.

En La Habana Vieja, a un pasito del antiguo palacio presidencial, hoy conocido como Museo de la Revolución, hay una pequeña callecita que llama la atención de todos los que llegan hasta ella. Te hablamos del Callejón de los Peluqueros.

¿Pero qué tiene de llamativo este lugar?

 

Callejón peluqueros

 

El Callejón de los Peluqueros, como su nombre lo indica, es un paseo estrecho compuesto por una sola calle que parte de Aguiar hasta muy cerca de la Avenida del Puerto y el Malecón habanero, en pleno corazón de La Habana.

En este Callejón no vas a encontrar los típicos salones de belleza o peluquerías, sino que todo el complejo se distingue por una mezcla de arte y buen gusto, surgida de la mano del estilista Gilberto Valladares, Papito.

Fue el resultado de un proyecto que hacía ya varios años en La Habana Vieja se venía gestando, y que por fortuna de vecinos y visitantes hoy dispone de atractivas propuestas gastronómicas, galerías de arte, espacios de venta de artesanías cubanas y servicios de barbería y peluquería.

Con servicio en áreas exteriores, donde es posible disfrutar de un ambiente bien agradable, este callejoncito también se ubica a pocos metros del Bar Cabaña, el Museo Nacional de la Música, el Hotel San Miguel y el Anfiteatro del Centro Histórico.

 

Callejón peluqueros

 

Así como otros atractivos entre los que sobresale el Palacio de la Artesanía, el Parque Infantil La Maestranza, el Palacio de Gobierno, el Restaurante Bar Galería Las Brujas y el Restaurante 5 Esquinas.

Para quienes buscan una buena comida cubana y de un paseo por la historia habanera en el Callejón de los Peluqueros encontrará ese sitio ideal con pequeños establecimientos y casas coloniales.

Cuando entres por este Callejón encontrarás una puerta, siempre abierta todos los días, aquí descubrirás el Museo de los Peluqueros donde verás curiosos y antiquísimos objetos propios de este oficio.

Si te aventuras a llevarte un cambio de look, hecho en Cuba, puedes pasar por un singular salón donde los antiguos relojes, cajas registradoras y los viejisimos sillones de barbería conforman el inusual decorado del salón.

En este callejón también disponemos de un parque infantil, una sala de expo-venta de obras plásticas y un curioso bar-restaurante llamado El Fígaro, donde podrás disfrutar de la sabrosa cocina cubana e internacional.