El Escambray, una sierra de cautivantes valores justo al centro sur de la isla de Cuba
Los amantes del alpinismo y el turismo de naturaleza encuentran en la Sierra de Guamuhaya, conocida popularmente como el Escambray, una de las zonas más ricas de Cuba, desde el punto de vista paisajístico.
Difícil será borrar del vocabulario popular cubano el legendario apelativo de Escambray, aun cuando ese accidente geográfico se denomina realmente Guamuahaya, un término aprobado por la Comisión Nacional de Nombres Geográficos, pero en definitivas un apelativo que nunca gozó de identificación por parte de los pobladores.
Dichas montañas se localizan al centro sur de la isla y muestran un relieve muy escabroso, sólo superado por la Sieerra Maestra, en el oriente cubano. Entre paradisíacos valles, tupidos bosques y altas montañas, el lugar ofrece al visitante la oportunidad de practicar el senderismo, el estudio y observación de aves y plantas, o disfrutar de los baños tonificantes en las pocetas naturales de ríos y saltos de agua.
A lo largo de 80 kilómetros El Escambray presenta varias cumbres que sobrepasan los mil metros de altitud, y que se hallan divididas por el río Agabama en dos macizos: el occidental denominado Sierra de Trinidad, mientras que la porción oriental forma la Sierra de Sancti Spíritus.
De manera general la parte de Trinidad es de mayor altitud que la de Sancti Spíritus y en ella se destaca la región de Topes de Collantes, con el pico de Potrerillo de 931 metros sobre el nivel del mar, como su mayor elevación, solo aventajado por el Pico San Juan, el de mayor altitud con sus mil 140 metros.
Las montañas del Escambray presentan en general una estructura de plegamiento, y muchas de sus elevaciones tienen formas cónicas como los mogotes de la Sierra de los Órganos en Pinar del Río, con grutas horadadas en sus faldas de pendientes casi verticales.
Sus principales rocas son las metamórficas, consideradas las más antiguas del archipiélago cubano. Con cuencas casi cerradas entre las montañas, muchas veces el agua de sus afluentes se precipita a través de cañones estrechos y de cascadas como las del río Hanabanilla.
Su flora es muy profusa en helechos arborescentes, pequeñas flores, orquídeas, pinos, plantas aromáticas y medicinales, así como árboles maderables autóctonos como la caoba, el algarrobo, el cedro y la majagua. Mientras que las abundantes lluvias en suelos de por sí arcillosos, propios de montañas altas y húmedas, propician el desarrollo de cultivos diversos como la caña de azúcar, el tabaco, el café y los cítricos.
Por otra parte, entre los ejemplares de la fauna destacan la cotorra, que vuela en grandes grupos, la jutía cimarrona, varias especies de murciélagos y mamíferos exóticos como los venados, la mangosta y el puerco jíbaro.
Entre los sitios de principal atractivo se hallan la Cueva Martín Infierno que se localiza a unos 40 kilómetros de Trinidad y a 56 kilómetros de Cienfuegos teniendo en su interior la estalactita más alta de Cuba y una de las mayores del mundo, con sus 67 metros de altura.
El nicho, Tope de Collantes, El valle de los Ingenios, o la Presa Hanabanilla, son algunos de los sitios que pueden ser visitados a lo largo del Escambray por los amantes del ecoturismo, que tienen en esta sierra una de las mejores opciones, por esa admirable conjunción que logra entre la naturaleza y la historia.