Las terrazas marinas de Punta de Maisí, consideradas entre las mayores y más conservadas del mundo
El sistema de terrazas marinas de Punta de Maisí perteneciente al municipio de igual nombre, situado en extremo más oriental de Cuba, en la provincia de Guantánamo, constituye uno de los mayores y más conservados ecosistemas de su tipo en el mundo.
Este impresionante sistema comprende terrazas marinas emergidas—veinticuatro en total— que junto a las sumergidas figuran también entre las más espectaculares y mejor preservadas del Caribe.
Algunas de la que emergieron alcanzan la asombrosa altura de 460 metros sobre el nivel del mar, mientras que las sumergidas llegan a tener una profundidad de 180 metros.
Estos accidentes geográficos narran la evolución del planeta ya que sus formas indican cómo ha sido el comportamiento de los movimientos tectónicos. El análisis de las de Maisí con sus 400 metros de altura, indica que dichos movimientos en el período cuaternario fueron más intensos en la región oriental que en la occidental, en la cual no sobrepasan los 100 metros.
Las terrazas marinas son el producto resultante de la acción erosiva del mar, que va desgastando la costa hasta terminar formando una plataforma de abrasión. Cuando desciende el nivel del mar o se elevarse el continente, queda expuesta dicha plataforma y este hecho da origen a una terraza marina nueva.
Claro está que este proceso resumido en cuatro líneas se desarrolla durante miles de años y provoca normalmente cambios bruscos en la pendiente, que adquiere una geometría escalonada como las de las impresionantes terrazas de la Punta de Maisí.
Cerca de ellas, un Faro de 166 años, sigue cumpliendo con su misión de orientar a las embarcaciones que atraviesan el Paso de los Vientos, situado entre Cuba y la Isla la Española y junto al viejo fanal, una encantadora playa de arenas blancas invita a relajarse en este lugar tranquilo solitario, que es todo un paraíso natural único.